El cuerpo… ¡Una máquina poderosamente desconocida!
Si empezamos desde lo más obvio y difundido como es que no utilizamos ni tan sólo un 10% de nuestro cerebro podemos intuir que la cosa es de traca.
Y si todavía desconocemos cómo funcionan partes de nuestro cerebro… Por supuesto, la gran mayoría ignora por completo cómo funciona su cuerpo (incluyendo a algunos gimnastas o deportistas de élite).
Para los que practicamos yoga, entender la mecánica de nuestra mente es requisito básico, pero también nos va a ayudar comprender los entresijos de nuestro cuerpo para poder seguir practicando por muchos años sin lesionarnos y sintiendo avances.
Ocurre a veces, que el alumno termina sintiendo una especie de “enganche” hacia el maestro y sus instrucciones.
Se crea dependencia de guía y no concibe la práctica si no es al lado de su maestro.
El problema de eso, es que el practicante se limita y queda totalmente a merced de las decisiones de ese maestro.
¿Y si por cualquier cosa deja de dar clases? Entonces… ¿Se acabó la práctica física?
Es muy importante desarrollar la confianza y la independencia y que incluso, el mismo profesor lo fomente entre sus alumnos.
La mejor manera de aprender yoga: Escucha interna
Pero obviamente, la práctica en solitario requiere de disciplina, entrega y como no, aprendizaje.
Uno puede caer en la zona de confort fácilmente y practicar asanas en piloto automático.
Ya sabes, unos saluditos al sol, unas cuantas posturas que me resultan cómodas y ale, a hacer el día.
Mientras tanto, el practicante está pensando en lo que tiene que hacer después o en aquello que le pasó la noche anterior…
O por ejemplo, ocurrir todo lo contrario, que el practicante se venga arriba y termine lesionándose por querer volar antes de andar.
Y para todo esto, tanto para los alumnos, como los profesores, nada mejor que comprender profundamente el funcionamiento del cuerpo.
Anatomía aplicada al yoga
El yoga es un camino espiritual, pero en él está implícito el uso del cuerpo, ya que es el medio por el cual, podemos llegar a la transformación de la mente (el objetivo final según los Yoga Sutras de Patanjali).
Y para descubrir el cuerpo, nada mejor que estudiar anatomía.
¿Qué me ocurrió a mi?
Como a cualquier otro estudiante, buscó en Google y le salió el prometedor libro de “Anatomía del yoga“.
Seguramente habrás visto la portada, te la dejo por aquí a la izquierda para que veas si te suena.
Tenía que preparar un taller específico para las caderas y sentía que dentro de sus páginas encontraría oro pero… ¡No fue así!
Tan sólo había un montón de asanas con los músculos implicados dibujados y un montón de nombres.
Al fin y al cabo, esto son cosas que en las formaciones de yoga ya había podido ver (o incluso, en los libros de ciencias cuando hice bachillerato).
Personalmente, creo que estudiar anatomía no es mirar una imagen y leer el nombre de un músculo, hueso o articulación.
Siento que va mucho más allá. Es algo que debe experimentarse.
De hecho, en mi formación de 200h, recuerdo perfectamente cuando en una clase de anatomía estudiamos la columna vertebral en parejas, señalando cada vértebra y observando en diferentes cuerpos las sutiles diferencias.
Y créeme, que ya eso no se me olvida, que tengo una visión muy clara de cómo es la columna y aprendí mucho más así, que mirando un dibujo en los apuntes.
Biomecánica aplicada al yoga
Por esta razón, hoy escribo este post. Para invitarte a aprender de forma integral, utilizando tu cuerpo como un laboratorio andante y sintiendo qué es lo que se mueve cuando te mueves, qué activas, qué relajas, qué afecta en cada movimiento y en cada respiración.
Más allá de nombres raros, mas allá de teorías.
Aprendiendo de verdad para poder aplicar a tu práctica de yoga.
Y ahora, la pregunta del millón…
¿Qué es la Biomecánica?
Así, resumiéndolo mucho: La biomecánica estudia qué ocurre en el cuerpo cuando se hace una cosa u otra.
Entender que cuando tú aplicas una fuerza X en tu cuerpo de forma irremediable está afectando a que suceda esto otro en Y.
También podemos experimentar un progreso palpable y notar avances en nuestra fuerza, flexibilidad y equilibrio.
Cuando uno se adentra a la biomecánica encuentra la cinética (estudio de las fuerzas que actúan sobre el cuerpo) y la cinemática (estudio de los movimientos del cuerpo).
Entonces, puede descubrir cómo hacer una práctica de yoga segura, efectiva y totalmente consciente.
¿Se puede estudiar un curso de biomecánica general para aplicarla al yoga?
Por supuesto que si, aunque como practicantes, necesitaremos sobre todo, sentir estos conocimientos en nuestro cuerpo.
Existen muchos cursos, pero personalmente, tengo alguna que otra preferencia que hoy voy a compartir contigo.
Por eso, mi recomendación es que realices un curso de biomecánica y anatomía para yoga, donde te van a dar todo lo realmente necesario y te van a evitar tecnicismos y teorías demasiado rígidas que al final, ni vas a saber cómo aplicarlas en tu práctica.
Te lo dejo a continuación para que lo disfrutes 😉
Razones por las que aprender Biomecánica si practicas yoga
1. Previenes lesiones
Comprendes cómo se mueve (y no se mueve) tu cuerpo en realidad, más allá de la estética de una postura. Esto evita forzar articulaciones o comprometer zonas vulnerables como las rodillas, cervicales o lumbares.
2. Profundizas tu alineación sin dogmas
Dejas de copiar posturas desde fuera y empiezas a alinear desde dentro, respetando tu estructura ósea, movilidad y proporciones. La biomecánica te da libertad, no reglas rígidas.
3. Mejoras la estabilidad y la fuerza funcional
Sabes qué músculos activar, cómo distribuir cargas y cómo sostenerte desde el centro. Esto se traduce en posturas más sólidas y una práctica más segura y potente.
4. Te vuelves consciente del movimiento fuera del mat
Entiendes cómo te sientas, caminas, cargas peso o subes escaleras. Yoga se convierte en una práctica viva más allá del estudio.
5. Transformas la manera en que enseñas (si eres profe)
Puedes leer cuerpos con más precisión, ofrecer ajustes inteligentes y adaptar secuencias con intención. Enseñas desde el conocimiento, no solo desde la experiencia.
6. Respetas tus límites con amor y ciencia
Dejas de forzar la apertura de caderas “porque toca” y empiezas a respetar si tu fémur choca con la pelvis. Menos frustración, más autoconocimiento.
7. Accedes a una práctica más sostenible a largo plazo
La biomecánica te da recursos para cuidar tu cuerpo con el paso de los años. Yoga deja de ser algo que “antes podía hacer” para volverse una práctica que evoluciona contigo.
Especialización en Biomecánica Aplicada al Yoga
Después de aprender con este curso, y de ver todo lo que se puede aplicar entendiendo algunos conceptos básicos de biomecánica, tengo la certeza de que la biomecánica aplicada al yoga es una auténtica joya.
Seas practicante o profesor, siempre es buena idea conocer más sobre anatomía y movimiento, básicamente porque el yoga, a pesar de ser una práctica espiritual y energética, se hace a través de las asanas y el cuerpo.
Por dónde empiezas con la biomecánica aplicada al yoga
El objetivo de todo esto es darte herramientas para poder aplicar y aprovechar los conocimientos de la anatomía y la biomecánica en tu práctica de yoga y/o en tus clases.
Tras acceder a este curso online serás capaz de entender las relaciones anatómicas y biomecánicas que se dan en tu cuerpo en posturas, vinyasas, ejercicios y transiciones.
Además serás capaz de abordar situaciones concretas con una metodología probada y efectiva para encontrar las adaptaciones más adecuadas y las progresiones más eficientes.
Cada cuerpo, con su particularidad, debe adaptar la práctica para que sea apropiada, ¿no te parece?
Así que ni te lo pienses, únete a la formación online y podrás ampliar tu formación sobre yoga y biomecánica.
¿Quieres contarme algo? ¿Te apetece compartir tu experiencia o dejarme alguna duda que te haya surgido?
Te leo por los comentarios encantada, un millón de gracias por pasarte a leerme.
Namaste 🙏
Hola! Quiero aprender biomecánica, cuando lanzamos un nuevo curso?
Hola! La gustaría saber si tenéis pensado volver a hacer la formación de biomecánica aplicada al yoga online.
Buenos días Pilar, si, ponte en contacto con Ariel de Gatica y di que has hablado conmigo 🙂
Yo también estoy interesada . Estoy estudiando Yoga Terapéutico y quiero profundizar en ese aspecto.