He querido hacer un post recopilatorio de las típicas preguntas que cualquiera puede hacerse antes, durante o después de sus clases de yoga.
Cosas que a lo mejor como alumno, no entiendes o que como profesor, nunca te habías planteado.
Espero de todo corazón que estas cuestiones queden resueltas y que por favor, si tienes alguna más, la dejes en los comentarios para que pueda incluirla y responder.
Preguntas sobre yoga y sus respuestas
Si ya te has adentrado en el mundillo, conocerás que según los yoga sutras de Patañjali el yoga tiene 8 brazos, ramas o pasos.
He querido incluir 8 preguntas sobre yoga que me parecen importantes para aclarar independientemente del tiempo que lleves en tu práctica.
Vamos a por ellas, una a una, aclarando incógnitas que puede que te hayan llegado a raíz de tus clases de yoga.
Nota: Por favor, si eres profesor/maestro de yoga y te apetece aportar, no te cortes y deja tu valor al alcance de todos en los comentarios. ¡Gracias!
1. ¿A qué se refieren los profesores de yoga cuando en sus clases te dicen “crece”?
No, no debes volver a la etapa de crecimiento ni subirte a unos zancos, tranquil@.
Cuando un profesor te dice que crezcas, suele hacerlo durante el momento en el que tomas aire.
Crecer no es más que un símbolo para interiorizar la sensación de dar amplitud al espacio que tienes entre vértebra y vértebra en tu columna.
Si haces una asana (o postura de yoga) sin crear espacio en los discos intervertebrales, es muy probable que a la larga devenga una lesión.
De ahí la importancia de “crecer” o “elongar” desde la columna vertebral en las inhalaciones, así toda tu columna, actúa como un sostén firme y estable desde la zona del sacro hasta las cervicales y tu asana se construye desde la seguridad y protección.
Antes de una torsión, flexión o extensión (cuando la columna se torsiona, se flexiona o se extiende), es necesario dar ese paso de crecer y sentir esa elongación vertebral en toda tu espalda.
2. ¿Cómo se cuándo tengo que inhalar y exhalar?
Pregunta de yoga importante que todos los principiantes se hacen en algún punto de su práctica.
¿Ahora qué iba? ¿Toca inhalar o exhalar?
Al final, saber este tipo de cosas te hace menos dependiente del maestro de yoga y eso, siempre ayudará a centrarte más en lo que sucede dentro de ti que en la retahíla de instrucciones que damos los profes.
Llegará un punto en que te salga naturalmente y no tengas ni que pensarlo, pero mientras ese punto llega, te lo explicaré lo mejor que pueda.
Siempre se comienza desde la inhalación, y suele darse en los movimientos que implican apertura de pecho, elevar brazos o extender columna vertebral.
También se puede dar en las vinyasas cuando pasas a una postura que sea de fuerza, por ejemplo, en el saludo al sol desde Uttanasana (pinza de pie) a Poorvottansana (plano inclinado o plancha de toda la vida).
Esto se hace así, para que después, bajes a Chaturanga o al suelo con rodillas, pecho y mentón con la exhalación.
Además, en estilos como Asthanga Vinyasa, pasamos de Samasthiti (de pie al frente de la esterilla) a todas las asanas de la secuencia fundamental (las asanas de pie, tipo guerreros) llevando nuestro pie derecho atrás con la inhalación, y es en la exhalación, donde nos acomodamos en casa postura.
¿Y la exhalación entonces? Normalmente se da en las posturas en las que nos cerramos desde el pecho, bajamos (brazos, tronco o cuerpo entero) o flexionamos nuestra columna hacia delante también con ayuda de la flexión de caderas.
En Surya Namaskar o saludo al sol, lo vemos cuando bajamos a Uttanasana, bajamos a Chaturanga y vamos a Adho Mukha Svanasana (o el tan famoso perro boca abajo).
La exhalación siempre nos ayudará a ir “un poquito más alla”.
Como decíamos, sería el paso posterior a la instrucción de elongación o crecimiento y daría relajación y distensión a la asana.
3. ¿Por qué las rodillas flexionadas no deben pasar la línea de los pies cuando hacemos la postura de la silla (Utkatasana)?
Esta frase es repetida una y otra vez por todos los maestros.
De hecho, es algo que generalmente te dicen en la formación para profesores de yoga.
¡Un chascarrillo de toda la vida que se dice!
¿Pero cuánto de verdad hay aquí?
Uno de mis maestros, Pedro Arce, al que desde aquí, hago una mención especial y reverencia, dice que debemos usar el cuerpo como laboratorio.
Si te pasa lo que a mi, sentirás que en Utkatasana el no traspasar la frontera de los pies con tus rodillas te hace sentir en una comodidad extrema.
Entonces, al quedarme ahí, no siento realmente la asana. Es como estar de pie.
No hay actividad básicamente porque mis cuádriceps pueden bajar mas.
Pero claro, ahí estaría rompiendo ese mandamiento, mis rodillas pasarían la línea de los pies y… ¿Mi postura de la silla sería incorrecta?
Siempre y cuando yo note trabajo y no molestia, mi pelvis se mantenga neutra y tenga el peso bien repartido en los pies… ¡Mi silla es perfecta!
Está claro que cada uno tiene el culo de diferente manera, entonces, mi silla ideal será distinta a la tuya.
Y cumpliendo la premisa de mi maestro, en mi laboratorio, he confirmado la hipótesis de que personalmente, debo de adelantar levemente las rodillas a mis pies para poder estar en Utkatasana de verdad.
Cada cuerpo, un laboratorio. Investiga en él siguiendo el sentido común o en manos de maestros de yoga experimentados.
4. ¿En la postura de la guirnalda (Malasana) los talones tienen que tocar el suelo?
Vuelvo a parafrasear a mi maestro, tu cuerpo, tu laboratorio.
Si tienes tal tensión en esta asana que resulta imposible llevar tus talones al suelo, no tienes por qué hacerlo por más que tu profe se empeñe.
Escucha atentamente tu cuerpo, y haz uso de un bloque para poder llevar a cabo el objetivo físico de Malasana, que no es otro que el de acceder a las caderas en profundidad.
Los pies son parte fundamental de nuestra práctica y lo creas o no, debemos de trabajarlos porque a raíz de usar calzado, los tenemos básicamente de adorno.
Los tendones y músculos de los pies, se podría decir que están atrofiados en la mayoría de nosotros (me incluyo) y trabajarlos en posturas de pie y equilibrio nos vendrá de maravilla.
5. ¿Qué quiere decir el profesor de yoga cuando dice “enraízate”?
Será que habrá que plantarse… ¡Pues no! Sino que debes hacer un buen apoyo de pies y sentir esa conexión con el suelo con firmeza.
Otro de mis maestros, Nacho Kaleta, me enseñó los 3 puntos de apoyo que debe haber en nuestros pies cuando nos apoyamos sobre ellos.
Dos en las almohadillitas, donde los metatarsianos, bajo el dedo meñique y el pulgar respectivamente. Otro, en el centro del talón.
Un buen enraizamiento hace referencia a una buena base de pies, un buen apoyo, unos buenos cimientos en las asanas.
Y es bien sabido que un triángulo forma una buena base para sostenerse.
Te recomiendo, como no, que pruebes por ti mismo a repartir bien el peso en estos 3 puntos de apoyo y sientas toda la base de tu pie implicado en casa postura de yoga.
¿Con las manos? Lo mismo, intenta abrir bien tus dedos en las asanas que estés sobre ellas, y apoyar bien las almohadillas, el talón y cada una de las falanges de tus dedos.
6. ¿Por qué se cantan mantras antes y después de la clase?
Como tú, el algún momento de mi práctica puse cara de póquer al presenciar cómo todos los compañeros y la maestra se ponían a cantar el Om dándolo todo.
Al poco, comencé yo misma a unirme, aunque eso sí, lo reconozco, aún con algo de reparo.
No entendí hasta mi formación con la Asociación Merkhaba el por qué de abrir y cerrar una sesión de yoga con mantras.
Aunque no los entiendas, aunque no te los sepas, tiene un poder especial.
El primero, ritualístico. Sin más, escucharlo al inicio y al final da una sensación de apertura y cierre.
Cantas el Om y a partir de ahí, comienza la marcha o termina.
El segundo poder especial que he descubierto en el mantra es su poder vibracional.
Cantar mantras no es sencillo, lo reconozco.
A veces, la mente enreda y la voz no se muestra por la labor.
Pero cuando el mantra sale desde el corazón, lo empujas por tu garganta y lo proyectas hacia fuera con fuerza, surge la magia.
Pon en duda todo esto que te cuento hasta que lo compruebes por ti mismo.
Recordamos, tu cuerpo, tu laboratorio.
7. ¿Es necesario tener accesorios para practicar yoga?
Con accesorios me voy a referir a todos los que se pueden usar durante tu práctica, no a las chuches espirituales de tipo geoda de amatista en la sala o palo santo encendido.
El ladrillo, taco o bloque, el cinturón, la silla, las mantas e incluso, el japa mala.
En mi opinión, está bien tenerlos.
Yo misma he rehusado de ellos durante tiempo y si, se puede practicar yoga incluso sin necesidad de esterilla.
Pero si que es cierto, que pueden ser de mucha ayuda sobre todo en los inicios o practicando posturas avanzadas.
Hay estilos como el Yin yoga o el Iyengar que no se conciben sin estos accesorios, en caso de practicarlos, ármate del kit.
Pero mínimamente un par de bloques, practiques el estilo que practiques, seguramente te vayan muy bien.
Y que no te de apuro usarlos, no eres ni más, ni menos yogui que el que no los necesita.
Si va a hacer que tu práctica o tu alineación sean más amables y progresivas, adelante.
8. ¿Por qué se dice que hay que tener el músculo activo pero sin tensión? ¿Cómo se hace eso?
Ya lo dice uno de los aforismos más conocidos de los yoga sutras de Patañjali :”Sthira Sukham asanam”.
En cada asana procuramos esfuerzo y comodidad.
Es decir, unos músculos se activan mientras que otros, se relajan. No hay tensión, pero sí, actividad para mantener la firmeza.
No hay dejadez, pero sí comodidad.
Te animo a que en cualquier asana, por ejemplo, durante un guerrero 1 (Virabhadrasana I) observes cómo está tu cuello, cómo está tu frente o tu mandíbula.
Mira a ver si puedes aflojar estas partes de tu cuerpo mientras mantienes la firmeza en pies, piernas, abdomen y brazos.
¿Podrías relajar los hombros? ¿Cómo se siente de esta forma la postura? Una vez más, utiliza el cuerpo como tu laboratorio personal de experimentos.
Leyendo a Iyengar anoche, justo decía algo así como que el yoga debe adaptarse a cada persona y no la persona al yoga.
Es decir, que cada cual, hará su asana pese a que en esta misma, se incluyan unas pautas de alineamiento concretas.
Y estas han sido las 8 preguntas sobre yoga que he visto necesario responder en este artículo, pero seguro que existen muchas más y si tú tienes una, por favor, transmítemela por los comentarios y le daré respuesta a partir de este punto del post.
Un millón de gracias por pasar a leerme, espero haberte sido de ayuda.
Namaste.
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